MPOX: Todo lo que Necesitas Saber sobre la Viruela Símica, Síntomas, Tratamiento y Prevención
La Amenaza Silenciosa de la Viruela Símica que se Expande por el Mundo
La MPOX, anteriormente conocida como Viruela Símica o Viruela del Mono, está emergiendo como una seria amenaza de salud pública. Originalmente identificada en primates de África Central, esta enfermedad ha cruzado fronteras y está causando preocupación mundial. Aunque un brote similar fue controlado en 2022, la nueva ola de infecciones que se vive actualmente presenta una mayor transmisibilidad y letalidad.
Pero, ¿Por qué MPOX es tan peligrosa? ¿Podría ser la próxima gran crisis de salud pública? En este artículo, te proporcionamos información esencial sobre la Viruela Símica: desde los signos y síntomas iniciales hasta el tratamiento y las medidas preventivas más efectivas. También explicamos cómo nuestros Hospitales CMQ están preparados para brindar atención especializada a los afectados por esta enfermedad.
¿Qué es la Viruela Símica y Por Qué es una Emergencia Sanitaria Internacional de acuerdo a la OMS?
MPOX es una enfermedad viral causada por un virus similar al de la viruela humana. Aunque la viruela fue erradicada en 1980, la viruela símica ha surgido como una amenaza significativa con brotes cada vez más frecuentes. Por ello, el 14 de Agosto de 2024 en respuesta al aumento en casos y su propagación a nivel global, la Organización Mundial de la Salud declaró la MPOX como una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional.
Impacto de la MPOX en México: Casos Confirmados en el País
Desde 2022 hasta agosto de 2024, México ha registrado 4,124 casos confirmados de MPOX por el Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE). Estos casos se han detectado principalmente en áreas urbanas con alta densidad poblacional, como la Ciudad de México. Sin embargo, a pesar de la alerta mundial, la situación en México está bajo control. En lo que va del año 2024, México acumula 53 casos con la mayoría de los casos concentrados en la capital. A continuación, de acuerdo a datos del Sistema Nacional de Epidemiología se muestra un resumen de los casos confirmados por estado:
Estado | Casos Confirmados en 2024 |
Ciudad de México | 32 |
Quintana Roo | 8 |
Jalisco | 3 |
Puebla | 2 |
Morelos | 2 |
Estado de México | 1 |
Nuevo León | 1 |
Sinaloa | 1 |
Veracruz | 1 |
Tamaulipas | 1 |
Tlaxcala | 1 |
Es importante tener en cuenta que los datos pueden cambiar rápidamente debido a la naturaleza dinámica de los brotes. Por lo tanto, es crucial mantenerse actualizado a través de fuentes confiables y oficiales. Sigue nuestras redes sociales para conocer más detalles sobre MPOX: Facebook Hospital CMQ.
Signos y Síntomas de la MPOX
Los síntomas de MPOX son similares a los de la viruela humana, pero generalmente son menos graves. Comienzan con fiebre, dolores musculares, fatiga y, a menudo, inflamación de los ganglios linfáticos. Por su parte, la erupción cutánea característica de esta enfermedad aparece en etapas más avanzadas, evolucionando a pústulas y costras. Asimismo, cabe resaltar que el período de incubación es de cinco a 21 días y se divide en dos fases:
- Primer periodo o fase febril: Sucede los primeros cinco días después del contacto con una persona infectada y se caracteriza por fiebre, dolores de cabeza intensos, inflamación de ganglios, y dolor muscular.
- Segundo periodo, conocido como periodo de erupción cutánea: Sucede entre los días uno y tres, después del inicio de la fiebre. En este periodo aparecen erupciones cutáneas que posteriormente se extienden al resto del cuerpo.
A pesar de que la mayoría de los casos se curan en unas pocas semanas, la viruela símica puede causar complicaciones graves. Esto sucede especialmente en niños, en personas con un sistema inmune débil y en aquellos sin acceso a atención médica adecuada.
¿Cómo se diagnostica la MPOX?
No es fácil identificar la viruela símica. Por ello, el diagnóstico se basa en una combinación de evaluación clínica y pruebas de laboratorio específicas. Debido a que los síntomas iniciales de la MPOX, como fiebre, dolor de cabeza, fatiga y erupciones cutáneas, pueden parecerse a los de otras enfermedades virales, es fundamental realizar pruebas de laboratorio para confirmar el diagnóstico. El primer paso para detectar MPOX es a través de una evaluación clínica completa. En este caso, se realiza una revisión de síntomas, cuerpo completo y se obtiene un historial que incluye la posible exposición a personas infectadas, viajes recientes a zonas endémicas o contacto con animales que pueden ser portadores.
El segundo paso es realizar una PCR; una prueba diagnóstica que consiste en la detección del ADN del virus. Afortunadamente, esta prueba es altamente sensible y específica, lo que permite una confirmación rápida y precisa del virus. La manera de realizar esta prueba es mediante el uso de un hisopo, el cual toma una muestra directamente de las lesiones cutáneas o costras restantes. Después, esta muestra es estudiada y tus resultados podrán confirmar si tienes la infección. Recuerda que un diagnóstico preciso es crucial para asegurar que recibas el tratamiento adecuado y prevenir la propagación de la enfermedad.
Transmisibilidad: ¿Por Qué es Contagiosa la MPOX?
La MPOX es altamente contagiosa debido a la capacidad del virus para propagarse a través de múltiples vías. En primer lugar, el modo de transmisión es el contacto directo con fluidos corporales de una persona infectada, como saliva, sangre, o secreciones de las lesiones cutáneas. Además, el virus puede sobrevivir en superficies contaminadas como ropa, sábanas o toallas, lo que aumenta el riesgo de transmisión indirecta cuando otra persona toca estos objetos y luego lleva las manos a la cara.
En segundo lugar, también se ha documentado la transmisión zoonótica, donde el virus se propaga de animales a humanos. Esto ocurre especialmente a través de mordeduras, rasguños o la manipulación de carne de animales infectados. La combinación de estos modos de transmisión convierte a la MPOX en una enfermedad altamente contagiosa, especialmente en comunidades con poca vigilancia y control de infecciones.
Tratamiento para la Viruela Símica
El tratamiento MPOX se centra principalmente en aliviar los síntomas y prevenir complicaciones graves. A la fecha, no existe un tratamiento antiviral específico aprobado exclusivamente para esta enfermedad. Sin embargo, algunos antivirales desarrollados para combatir la viruela humana, han mostrado eficacia en el tratamiento de casos graves de MPOX y se utilizan bajo supervisión médica. Además, el manejo de la enfermedad incluye cuidados como el control de la fiebre, el manejo del dolor y la prevención de infecciones secundarias que podrían complicar la salud de los infectados.
¿Existen Vacunas para la MPOX?
Anteriormente la vacuna contra la viruela tradicional se utilizaba para tratar la MPOX. Sin embargo, a medida que el virus evoluciona, esta vacuna ha perdido su porcentaje de efectividad. En la actualidad, únicamente existe una vacuna MPOX de la empresa Bavarian Nordic. Dicha vacuna, lleva por nombre JYNNEOSⓇ, y es una forma debilitada del virus, lo cual quiere decir que no causa la enfermedad. Si te interesa conocer más detalles sobre esta vacuna, te invitamos a leer el siguiente artículo propiedad de The National Institute of Health.
El 12 de Septiembre de 2024, COFEPRIS determinó que la vacuna Jynneos cumple requisitos de calidad, seguridad y eficacia para prevenir la viruela y viruela símica.
Medidas Preventivas para Evitar el Contagio de la Viruela del Mono
Para prevenir el contagio de la Viruela Símica (MPOX), es fundamental adoptar una serie de medidas que minimicen el riesgo de exposición al virus. La primera y más importante es evitar el contacto directo con personas infectadas, especialmente si presentan lesiones cutáneas asociadas a la enfermedad. Además, dado que la MPOX puede transmitirse a través de fluidos corporales y superficies contaminadas, es esencial no compartir objetos personales con alguien que pueda estar infectado.
Hospital CMQ: Preparados para Combatir la MPOX con Servicios Especializados y Atención Médica de Excelencia
En respuesta a la creciente preocupación global por la MPOX, nuestros hospitales han fortalecido sus capacidades para brindar atención médica de calidad a quienes puedan verse afectados por esta enfermedad. Además, contamos con un equipo de profesionales de la salud altamente preparado para manejar casos de MPOX con el máximo cuidado y eficacia. Nuestras modernas y equipadas instalaciones nos permiten ofrecer un diagnóstico veloz, un tratamiento adecuado y un seguimiento continuo para garantizar la recuperación de nuestros pacientes.
Nuestro compromiso con la salud de Puerto Vallarta y Bahía de Banderas se refleja en la implementación de estrictos protocolos de control de infecciones y en la dedicación de nuestro personal médico y administrativo. En Hospital CMQ, estamos listos para enfrentar la amenaza de la MPOX y brindar tranquilidad a quienes confían en nosotros.
Si tú o tus seres queridos presentan algún tipo de sintomatología MPOX, acudan a nuestros hospitales para una valoración. Nuestro equipo médico puede apoyarles.
Llama al 322 226 6500 para más detalles.
Preguntas Frecuentes sobre la MPOX en México
MPOX es una enfermedad viral causada por el virus de la Viruela del Mono, similar al virus de la viruela humana, pero generalmente es menos grave.
Los primeros síntomas incluyen fiebre, dolor de cabeza intenso, dolores musculares, fatiga, y ganglios linfáticos inflamados. Posteriormente, aparece una erupción cutánea que pasa por varias fases, desde manchas hasta ampollas llenas de pus.
MPOX puede ser grave, pero la tasa de mortalidad es baja. La mayoría de los casos son leves y se recuperan sin complicaciones graves.
El tratamiento es principalmente con medicamentos para aliviar el dolor y la fiebre. La recuperación generalmente toma entre 2 a 4 semanas
En esta nueva ola de transmisión, los niños están siendo las principales víctumas. Sin embargo, las personas con deficiencia inmunitaria pueden estar más expuestos a formas graves de la enfermedad.
Aunque la MPOX es contagiosa, su capacidad para desencadenar una pandemia es limitada. Sin embargo, la vigilancia continua es crucial para evitar brotes significativos.